martes, 10 de marzo de 2009

Friso prehispánico confirma mitología maya en Guatemala



El arqueólogo estadounidense Richard Hansen, a la derecha, muestra un friso encontrado en el sitio arqueológico maya El Mirador, en Guatemala, el sábado 7 de marzo de 2009.

Un friso de hace unos 2.300 años que decora unas piscinas en la acrópolis Maya de Mirador da nuevas evidencias de que las historias del libro sagrado de los mayas, el Popol Vuh, no fueron adaptadas a la religión católica por el sacerdote español que lo tradujo.

"Por mucho tiempo se dijo que (el Popol Vuh) tenía influencia europea, pero en lo que se refiere a la mitología, no es falso. Es algo que plasmaban (los mayas) desde antes del 200 antes de Cristo", dijo a la AP el arqueólogo independiente y curador del Museo Miraflores en esta capital, Juan Antonio Valdez.

Valdez no ha visto el friso y habló sobre el valor que tendría el descubrimiento si en efecto los personajes del friso son quienes asegura su descubridor, el arqueólogo estadounidense Richard Hansen.

Hansen es director del departamento de antropología de la Universidad de Idaho y tiene más de 30 años estudiando la cuenca del Mirador. Es además el director del Proyecto Arqueológico El Mirador.

Hasta ahora ningún arqueólogo independiente ha inspeccionado el friso, presentado al público el pasado fin de semana.

"Los paneles encontrados demuestran la importancia del Popol Vuh... un documento histórico de extraordinaria antigüedad", dijo a la AP Hansen.

El friso muestra a los héroes gemelos -nacidos de una virgen-, Hunapú e Xbalanqué, saliendo del inframundo tras su resurrección y luego de derrotar a los señores del infierno. Se les muestra portando la cabeza de su padre, quien había sido decapitado por los señores de Xibalbá, como se llama ese lugar de tormento. De acuerdo con la tradición, tras esa victoria sobre la muerte, los hermanos suben al cielo, uno al sol y el otro a la luna.

La historia guarda similitud con la muerte y resurrección de Cristo y por ello se pensó que Francisco Jiménez, el fraile español que tradujo al castellano el texto cerca del año 1700, había cambiado pasajes del libro sagrado de los mayas para adaptarlo a la tradición católica.

El arqueólogo Oswaldo Chinchilla, curador del Museo del Popol Vuh, añadió que "independientemente si son o no son los héroes gemelos, el friso esta extremadamente bien conservado y eso ya en sí mismo es interesante por el hecho de la fecha tan temprana de la que data".

En el mirador, ubicado en el norte del selvático departamento del Petén, está situada la pirámide de La Danta, la estructura más alta de Mesoamérica con 72 metros de altura. El sitio estuvo habitado desde aproximadamente mil años antes que Tikal, una de las acrópolis mayas más famosas.

El friso decora una piscina donde se cree que se bañaba la clase dominante de la ciudad. La piscina forma parte de un complejo sistema de recolección y distribución de agua de lluvia para la ciudad que, según Hansen, llegó a tener un millón de habitantes durante su apogeo.

La tesis del arqueólogo estadounidense es que esta y otras ciudades de la cuenca decayeron debido a la explotación irracional de sus recursos naturales.


Fuente:

El Nuevo Herald

2 comentarios:

Alicia Blázquez dijo...

muy interesante tu escrito...
un beso..

josef dijo...

Im presionante documento. Interesantísimo. siempre me empapo de tu blog. gracias de nuevo Achernar por la valiosa aportación cultural...